Trastorno Mental

Un trastorno mental es un trastorno general y persistente de las funciones psíquicas que se caracteriza por confusión de ideas, alteración de las emociones y conducta desajustada o inadaptada. Puede tener origen orgánico, es decir físico como por ejemplo después de un accidente con traumatismos de cráneo, o funcional, que es lo que ocurre después de un trauma o problema emocional. Los más frecuentes los desarrollaremos en estas páginas.

La normalidad

 Es natural que los padres se preocupen por la salud y el bienestar de sus hijos. Muchas madres y padres ven a sus niños como normales. Sin embargo, algunos otros se preocupan porque su bebé, niño o adolescente tiene un problema. Estas preocupaciones pueden incluir preguntas acerca de cómo se está desarrollando el niño, su bienestar emocional, qué dice o piensa y siente el niño, cómo el niño actúa, sus hábitos de comer y de dormir, su comportamiento en la escuela, cómo se lleva con su familia y sus amigos y cómo se enfrenta al estrés.

Los psiquiatras y psicólogos de niños y adolescentes trabajando conjuntamente pueden ayudar a los padres y a la familia a poder contestar las preguntas acerca de qué es normal y qué no lo es. Ellos generalmente entrevistan al niño y le hacen preguntas a los padres acerca de la salud previa del niño y de su comportamiento. También pueden hacer preguntas acerca de cómo se lleva la familia. Es probable que los bebés, los niños o los adolescentes sean normales si a la edad apropiada ellos participan totalmente y disfrutan aprendiendo en la escuela y/o del trabajo, de las relaciones dentro de la familia, de los vínculos con sus amigos y del jugar.

Muchos padres discuten primero sus preocupaciones sobre la normalidad de su hijo con un miembro de la familia, un amigo, el médico del niño, un consejero escolar quien puede entonces referir la familia a un psiquiatra de niños y adolescentes. El escuchará cuidadosamente a los padres y al niño antes de esclarecer las dudas. Basado en la evaluación, el psiquiatra de niños y adolescentes podrá tranquilizar a los padres explicándoles cómo pueden reforzar el desarrollo normal, sugerir actividades o un programa educacional para el niño, y/o educación para los padres, que refuerce los procesos normales de desarrollo y crianza efectiva, proveer o planear breves sesiones de psicoterapia o psicoeducación para ayudar a los padres y al niño con problemas del desarrollo, en situaciones de la vida que produzcan estrés o en las dificultades debido al temperamento del niño. Si la evaluación revela que el niño tiene un desorden psiquiátrico, el especialista de niños y adolescentes recomendará un programa de tratamiento específico.

Los padres, mejor que cualquier otra persona, conocen a su hijo y saben cuál es su comportamiento normal. Si a usted le parece que su hijo tiene un problema, busque ayuda profesional. Es de mucha importancia ese primer paso que deben tomar para saber con seguridad si existe un problema y, si éste es el caso, qué medidas ayudarán más al niño.

Fuente de referencia: Academy of child and adolescent Psychiatry - Compilado y actualizado por la Dra. Analy Werbin - 5/2/2008