28/03/2024
|
Ansiedad de Separación
Los niños se niegan a ir a la escuela, los niños se niegan a ir a jugar.
Para los niños pequeños ir a la escuela en general es un suceso excitante y atrayente. Sin embargo para algunos esto les da mucho miedo y hasta pánico. Los padres empiezan a preocuparse cuando el niño empieza a sentirse enfermo con cierta regularidad o pide quedarse en la casa y no ir a la escuela con quejas físicas sin importancia. Este no querer ir a la escuela puede ocurrir en cualquier momento, pero es más común en los niños de 5 a 7 y de 11 a 14 años, momentos en los que los niños se enfrentan con nuevos desafíos en la escuela. Estos niños pueden padecer un temor que los paraliza por tener que dejar la seguridad de la casa y de la familia. No es fácil para los padres enfrentar estos miedos infantiles y a la negación de ir a la escuela, pero estos problemas de los niños pueden tratarse con éxito siempre que se cuente con la ayuda profesional adecuado. Pareciera que los niños que padecen este trastorno se niegan a ir a la escuela después de un período en que se quedaron en la casa con su mamá o con su papá y se ha apegado a ellos, por ejemplo, después de las vacaciones, de los días de fiesta, después de una enfermedad banal, después de un evento que le produzca estrés, como la muerte de un familiar o de una mascota, un cambio de colegio o una mudanza o una emigración, problema muy común en la actualidad. El niño se puede tener síntomas como dolores de cabeza, de garganta o de estómago justo antes de la hora de ir a la escuela. La enfermedad mejora cuando se le permite quedarse en la casa, pero reaparece a la mañana siguiente antes de ir a la escuela. En algunos casos, el niño se niega por completo a salir de la casa. Como el pánico surge al dejar la casa, y no por estar en la escuela, el niño por lo general está tranquilo una vez que está en la escuela. Los niños que tiene un temor no razonable para ir a la escuela pueden:
Tales temores son comunes entre los niños que tienen el problema de ansiedad por la separación. Los efectos potenciales a largo plazo (ansiedad y desorden de pánico al llegar a adultos) pueden ser muy serios para un niño con ansiedad por la separación persistente. El niño puede desarrollar serios problemas escolares y sociales si deja de ir a la escuela y de ver a sus amigos por mucho tiempo debido a los miedos y la ansiedad.
Cuando los temores persisten, los padres deben consultar a un profesional de la salud mental especialista en niños, quien trabajará con ellos para desarrollar un plan para hacer regresar de inmediato al niño a la escuela y a otras actividades. Los niños mayores o los adolescentes que se niegan a ir a la escuela padecen por lo general de una enfermedad más grave y a menudo requieren un tratamiento de otras características. El miedo irracional y el pánico de dejar la casa y a los padres e ir a la escuela o a hacer otras actividades se trata con éxito, siempre y cuando sea el profesional adecuado y la familia colaboradora. Compilado y actualizado por la Dra. Analy Werbin - 5/2/2008
|
|
||||||||||||||||||
Copyright, 2007, Casa Joven - Asociación para la Detección e Intervención Precoz de Trastornos Mentales y Disociales en Niños y Adolescentes - Entidad sin fines de lucro inscripta en el Registro Nacional de Asociaciones de España Nº 587305 del 28/06/2006 - Sede Social: Avda. Cánovas del Castillo 6 - 5º Piso - 29016 Málaga, España |